Consiste en la aplicación de ondas electromagnéticas de alta frecuencia a través de un tratamiento no invasivo e indoloro. Estas ondas logran calentar las diferentes capas de la piel con la ayuda de una tecnología que actúa en las capas de mayor profundidad mientras protege la epidermis durante todo el tratamiento. Tersa la piel y trata cualquier parte del cuerpo.

Este tratamiento es válido para pacientes de entre 21 y 70 años que desee un mejoramiento en su rostro o cuerpo.

El sistema de radiofrecuencia hace poder controlar con precisión el calentamiento y enfriamiento de energía en la piel a diversas profundidades. Esto hace que las células grasas se contraigan y así, contraer el tejido de la piel.

Podemos aplicar este tratamiento con éxito en la zona de los ojos, alrededor de la boca, la barbilla, la mandíbula, el escote, los brazos, las piernas, las rodillas, los tobillos, las nalgas, el abdomen, las asas y las zonas íntimas.

Ademas la radiofrecuencia BTL es un tratamiento totalmente indoloro, no requiere anestesia, por lo que no requiere periodos de reposo y puede retomar la rutina diaria de inmediato.

El número de sesiones varía según la patología (manchas, cicatrices, arrugas), el tipo de peeling, las características individuales de cada paciente. Entre sesión y sesión se suele dejar una semana, mínimo, para que la piel se recupere.

Depende de sus necesidades y resultados que quiera obtener, pero entre 2 a 4 sesiones serán suficientes para obtener unos buenos resultados.

Cada sesión puede durar entre 15 y 30 minutos, dependiendo de la zona a tratar.

Desde el primer tratamiento ya comienza a percibir mejoras visibles.Uno de los efectos más inmediatos es la reducción de arrugas dejando la piel más tersa y la mejoría gradual de la celulitis.

incluyen los gimnasio, las saunas o los sitios húmedos y cálidos. Lo único que conseguiríamos es humedecer la piel y que esta se infectara, ya que los poros de nuestro rostro están especialmente afectados por el peeling.